Un gremio de la AFIP impulsa un proyecto para liberar de Ganancias a los trabajadores

Publicado por

Proponen que todos los gastos puedan ser deducidos para la cuarta categoría. El «blanqueo» que traería aparejado compensaría lo que se deja de recaudar.

Un proyecto que se presentó al Senado propone un cambio radical en Ganancias para los trabajadores en relación de dependencia que hoy tributan este impuesto: que todos los consumos realizados en el país, puedan ser deducidos de Ganancias.

La propuesta de la Unión del Personal Superior de la AFIP, el gremio de personal jerárquico del ente recaudador, está siendo trabajada con el senador Antonio José Rodas (Frente de Todos-Chaco) y también conversada con varios dipusindicales del oficialismo -entre estos el jefe de La Bancaria, Sergio Palazzo, que anima uno de los proyectos para elevar el mínimo no imponible de Ganancias, uno de los principales reclamos de ese gremio de altos ingresos.

Con las nuevas deducciones abarcativas de todos los consumos en el país, se busca generar una “espiral de consumos” y tender a un blanqueo de la economía.

“Es un círculo virtuoso, en el cual el Estado recibirá más dinero por esta formalización de la economía que el que recibe por la cuarta categoría. Es una manera de reactivar la economía en el año electoral con un derrame a la clase media y la clase trabajadora sin emitir ni un peso ni endeudarse”, señala Julio Estévez (h), secretario general del gremio.

El nuevo mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias a la cuarta categoría es de $ 330.000 mensuales desde el 1 de noviembre. Si bien esta suba decidida por el Gobierno benefició a 380 mil trabajadores en relación de dependencia, casi 1 millón de trabajadores siguen tributando este impuesto.

En el gremio UpsAFIP señalan que “hoy pagan mucho más de ganancias las personas físicas en relación de dependencia que hace unos años y mucho menos las empresas, y la economía en negro crece sin parar, facilitando la inflación descontrolada”. Según indican en el último mes de recaudación la 4ta categoría respecto del total de Ganancias fue del 18%.

La propuesta fue elaborada por el equipo Det-Ar -Desarrollo Tributario para Argentina- que lidera la contadora Mariana de Alva, secretaria de la seccional Buenos Aires del gremio y que fue subdirectora de la AFIP en el segundo mandato de Cristina Kirchner. Tiene un objetivo político bastante explicitado: creen que podría ser llave para una reactivación y que el oficialismo mejore sus chances en las presidenciales de 2023.

En cuanto al proyecto “fue testeado en los bancos de prueba operativos de la AFIP por el equipo técnico integrado por compañeros con mucha antigüedad en la AFIP que participaron en posiciones de conducción técnica y política durante los gobiernos de Nestor y Cristina Kirchner. Es posible desarrollar en breve lapso los elementos necesarios para la instrumentación”, aseguró De Alva, apuntando a “garantizar el delicado equilibrio que implica el mantenimiento de las fuentes financieras que integran los ingresos públicos”.

La deducción de gastos, explicó Estevez, se haría mediante el uso de tarjeta de débito correspondiente a una caja de ahorro asociada a la clave única de identificación tributaria o laboral (CUIT o CUIL) del trabajador. También habrá una Tarjeta de Identidad Fiscal (TIF) con chip, código QR y banda magnética, aunque advirtió que “no se podrán generar saldos favorables que puedan trasladarse a períodos posteriores”.

Ahorro y consumo nacional

Las deducciones serían sobre productos de industria nacional o consumo de servicios en el país, facturados y documentados. Se habilita la deducción de los intereses y capital de créditos hipotecarios. Y se habilita la deducción de inversión en compra de acciones de “empresas estratégicas” -las que deberían ser definidas por ley- “con el objetivo de no depender de inversión externa, concentrar el ahorro que va a dólar y evitar la concentración y extranjerización de estos recursos”.

Aseguran que “el impuesto a las ganancias dejado de recaudar volverá inmediatamente en incremento de IVA, impuesto al cheque, impuestos internos y ganancias de las otras tres categorías, por el multiplicador de la velocidad de transferencias de las nuevas operaciones”.

Consultado por Clarín, el tributarista César Litvin opinó que “la idea es buena y habría que hacer una simulación de pérdida de recaudación de Ganancias, contra el blanqueo que traería”.

“Lo positivo es que incentiva a blanquear más los consumos que hacen las personas humanas y que hoy no tienen motivación alguna en pedir factura. Lo negativo es que es mas trabajoso para la AFIP el control de los gastos de consumo”.

El especialista advirtió que para implementarlo “hay que hacer algo con la tecnología para que el mismo comprobante no se use para deducciones por parte de varias personas humanas”. Por último, Litvin planteó como duda “si se sustituye el mínimo no imponible o no, o queda un mix, porque podría ser una pérdida de recaudación importante”.

El proyecto postula que «no (se) requerirá mover más el mínimo no imponible».

Fuente: Clarín